Los cigarrillos electrónicos, también conocidos como vapeadores, se han convertido en un sustitutivo del tabaco para muchos fumadores. Su popularidad ha crecido significativamente en los últimos años, siendo a día de hoy un producto muy consumido también por los jóvenes. Entre la población se ha extendido la idea de que el cigarrillo electrónico es poco o nada dañino para la salud. En Clínica Dental López Lanzas hablamos sobre este mito, exponiendo los principales riesgos que supone su utilización para la salud bucodental.
Los vapeadores son dispositivos con diseño de bolígrafo que funcionan con cartuchos rellenos de diversas sustancias. Al calentarse, estos componentes se convierten en vapor que inhala el consumidor. A pesar de que esta inhalación no contiene alquitrán ni monóxido de carbono como el tabaco, los cartuchos incluyen sustancias perjudiciales como la nicotina. Ante la falta de regulación y los escasos controles de seguridad, la composición de los cartuchos es muy variada, pudiendo llegar a contener diversas sustancias químicas consideradas tóxicas.
El Comité Nacional Para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) asegura, en relación a productos como el cigarrillo electrónico, que “no existe una forma sana de fumar”. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene desde el año 2014 que estos dispositivos generan efectos perjudiciales en las vías respiratorias. Asimismo, mantiene que no hay suficientes evidencias científicas que demuestren su eficacia para dejar de fumar.
Con respecto a la salud bucodental, la nicotina presente en estos vapeadores ocasiona diversos problemas. Cuando el cuerpo consume esta sustancia, tiene una menor capacidad para generar flujo salival. En consecuencia, se produce la sequedad bucal. Sin la suficiente saliva, la boca queda más expuesta a las bacterias y es más propensa a padecer desde llagas a infecciones bucales como la candidiasis. La ausencia de saliva también está relacionada con la halitosis.
Por otro lado, la nicotina actúa sobre los vasos sanguíneos presentes en las encías y debilita sus defensas naturales para combatir enfermedades que pueden originarse en las mismas. El riesgo de padecer gingivitis o periodontitis aumenta significativamente. Si el paciente se somete a algún tratamiento para estas patologías, la capacidad de cicatrización de las encías es mucho menor.
Asimismo, la nicotina suele empeorar el bruxismo. Ésta actúa como estimulante para los músculos, provocando que la persona apriete con más frecuencia e intensidad los dientes. De esta forma, se produce un mayor desgaste de las piezas dentales.
Otro elemento que suele estar presente en los cigarrillos electrónicos y que afecta a la salud bucodental son las nitrosaminas. Estos componentes químicos no tienen por qué ser perjudiciales, pero las contenidas en los vapeadores y cigarrillos tradicionales son carcinógenas y potencian la aparición del cáncer oral.
Desde Clínica Dental López Lanzas, tu dentista en Málaga, recomendamos abandonar el hábito de fumar al completo. Es un gran paso para mejorar la salud en general y recuperar la sonrisa sana y bonita. Ante cualquier problema con tus dientes y encías, no dudes en pedir cita. ¡Visítanos!